En esta noche de otoño
Se siente bajo la lluvia
el intenso peso de la soledad
caer como plomo derretido sobre mi espalda.
Y clavarse sobre mis lunares,
como diminutos alfileres de amargura.
En esta noche sin luna
en la que ciudad es iluminada
por una luciérnaga moribunda.
Mi corazón es una rosa
Que se muere dentro de mi pecho.
y la poesía es una mariposa de ceniza
que se consume entre las yemas de mis dedos.
En esta noche sin tí
Me ronda el fantasma de la nostalgia.
Y he creado con mis lágrimas
mi pequeño cementerio de besos agonizantes.
Donde mi cuerpo. Amortajado con el hilo rojo del amor
es alimento de las mariposas caníbales de mi sufrir.
Que con su diminuta lengua, van secando poco a poco mis entrañas
Hasta dejar mi romántico cadáver pudrirse sobre el primer charco de lluvia.
En donde quedaron reflejados tus ojos azules.
Como diminutos espejos al mar de mi sentir.
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