viernes, 23 de marzo de 2018

A veces

A veces me olvido
de ser persona.
Y vuelvo al origen del agua.
A veces me corto las muñecas
con el tallo de una rosa.
Y no es sangre lo que fluye por mis venas
sino gotas de tinta y destellos de luna.
A veces en sueños
me ahogo con mi propia voz
convertida en pulpo.
A veces quisiera romper el muro telurico
de la pared del tiempo.
Para volver a nacer siendo semilla
de la flor del sueño.
A veces me clavo
mariposas de plástico en la piel.
Para recordar el tacto de la infancia.
A veces me pesan sobre la frente
las horas muertas
del oscuro reloj de mi melancoliza.
Y siento que la vida
es un caimán comiéndome los pies.
A veces me pierdo
en la silueta cóncava de los espejos.
Pero solo a veces recuerdo...
Que soy el pentagrama en blanco
En donde escribir
los acordes de mi propia composición.

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